martes, 29 de marzo de 2022

VOLVER A EMPEZAR


 

     He elegido este título para mi reportaje en el blog, debido a que al igual que en la famosa película: VOLVER A EMPEZAR sucedió algo parecido a lo que hice yo hace unos quince días después de tanto tiempo de abstinencia forzada y ni os podéis imaginar con cuantas ganas de divertirme viciosamente inicié, la que espero sea una larga andadura plagada de buenos ratos placenteros y morbosos.

 

     Para esa primera vez, elegí el acudir al pub swinger Eskandol. Dicha elección vino dada, por haber leído en sus eventos, que esa noche estaría dedicada a la vestimenta de látex o vinilo. Ese tipo de prendas que tanto me gusta lucir, aunque para mi posterior decepción comprobaría que ese día fui la única mujer que acudió ataviada con ese tipo de vestidos.


 

     Al llegar al pub me dirigí a la zona del bar seguida de mi sumiso maridín, en la barra se encontraban algunos clientes, que como suele suceder, observaron nuestra llegada. En primer término, había una parejita bastante joven en animados toqueteos, algo más hacia el fondo estaban dos chicos de unos treinta y pocos, que aparentemente eran amigos y algo más atrás se encontraba otro hombre solo, que rondaría la cincuentena. Este último no me quitó ojo desde el primer momento que entré, recorrió descaradamente mi cuerpo con la mirada de arriba a abajo varias veces, sin importarle lo más mínimo la presencia de Porky.

 


     Pedí a la camarera que me sirviera mi bebida preferida, para las ocasiones en que salgo a pasarlo bien, mientras que para el ciervo le pedí un batido de fresa que le ordené tomarlo lejos de mí, con el fin de que no me espantara los posibles moscones, aunque para mayor humillación del manso, desde su asiento podía ver cómo me mostraba seductoramente. Me acomodé provocativamente en uno de los taburetes altos situado a unos tres metros más apartado de la barra, con la intención de hacerme más visible a las miradas de los posibles machos. La misma altura de la banqueta, propició el que mi corto vestido quedara bastante subido, mostrando con descaro la parte superior de las medias y casi dejando adivinar la minúscula braguita que apenas tapaba mi caliente coñito. Esa exhibición de mi cuerpo, consiguió que aquellos tres hombres estuvieran pendientes de mis movimientos y no perdieran detalle de lo que sugerentemente les mostraba. Permanecí un tiempo abriendo y cerrando los muslos de forma insinuante tratando de despertar el máximo interés de alguno de ellos, cosa que conseguí, pero como suele sucederme, ninguno dio el paso de acercarse (Cuánto les cuesta a los tíos lanzarse, por fácil que se lo pongan) a veces me pregunto, sí no sería mejor mostrarme más discreta o pudorosa ya que en muchas ocasiones se me genera la duda de si con mi actitud desinhibida los estaré intimidando.

 


     Como pasaban los minutos y ninguno de ellos movía ficha, decidí ser yo quien lo hiciera, le hice una señal a Porky para que me siguiera y me dirigí al cuartito del glory hole. No habían pasado ni cinco minutos de estar dentro, cuando comenzaron a salir por los agujeros manos y pollas que de inmediato quise tocar y calibrar, (hacía mucho tiempo que no tenía entre mis dedos un buen rabo de macho) ansiaba sentir el calor y la dureza de una verga de verdad. Para mi gusto las aberturas circulares de la pared quedaban demasiado bajas y resultaban algo incómodas para llevar a cabo todo el vicio que un pasillo francés me inspira, además, era imposible que los machos pudieran sobar mis tetas o lamer mis pezones, cosa que me encanta y excita cuando lo saben hacer bien. De todas formas, consideré que el hielo estaba roto y ya se habrían dado cuenta de lo cachonda y zorra que puedo llegar a ser, así que decidí salir de nuevo a la barra y comprobar si alguno de aquellos varones, que incluso ya habían podido tocarme el chocho, era capaz de comportarse de forma más decidida.

 


     Para mi decepción los tres seguían igual de parados, sin atreverse a proponerme absolutamente nada, ni siquiera acercarse para hablar, me costaba admitir que por lo menos dos de ellos que habían metido sus dedos dentro mi rajita no fueran capaces de ponerse a mi lado ni rozarme siquiera y os aseguro que mi chochito huele muy bien y sabe mejor. En los ojos de ellos se podía ver perfectamente el deseo que por mí sentían, pero también se adivinaba la falta de saber gestionar una situación como la que se les estaba presentando.

 


    Para que no fuera un obstáculo, ordené de nuevo a Porky que se alejara de mí, pero a pesar de ello, siguió sin haber cambios en la actitud pasiva de los chicos, así que decididamente y sin hacer caso alguno del cerdo mirón, me metí en el cuarto oscuro en el que por el momento no había nadie, con el rabillo del ojo pude comprobar como la mirada deseosa de los tres "tenores" seguía mis pasos, pero lamentablemente sus cuerpos parecía que estuvieran anclados a la barra, permanecí en la casi total oscuridad como unos diez largos minutos en los que aproveché para acariciarme los pezones y la rajita que estaba sumamente caliente y húmeda, hasta que dándome cuenta de que si continuaba sobándome el clítoris me iba a correr, decidí parar y volver a salir fuera. Quería correrme, claro que sí...lo necesitaba..., pero quería hacerlo de otra manera mucho más morbosa.

 


     Al salir y ver que nada había cambiado, decidí darles una última oportunidad a ellos y por supuesto también a mí. Pensé y me di cuenta de qué si no era más explícita o provocadora, esa noche me iba a resultar complicado disfrutar con un buen macho. Me senté enfrente de ellos y abrí las piernas como una puta, dejando ver mi transparente mini braguita, mientras que con mi mano derecha me acariciaba la parte alta de los muslos que no cubrían las medias y mis ojos los miraban insinuantemente. Uno de los dos jóvenes no me atraía demasiado, pero el otro sí que me resultaba bastante apetecible, además, me pareció que este último era el propietario de la polla de mejor tamaño que yo había sobado en el pasillo francés, aunque como podéis ver en el vídeo a ninguno de ellos se le había puesto totalmente tiesa.

 


     Continué tocándome y jugando seductoramente con la mirada y las sonrisas, me centré más en el chico que me gustaba y comprobé como posaba sus ojos en mí con evidente deseo, pero para mi desesperación pude constatar que le costaba muchísimo mantener el cruce de miradas. En uno de esos intercambios visuales, le lancé un guiño cómplice, al mismo tiempo que le hice un gesto con la cabeza en dirección al cuarto oscuro, en ese instante percibí en él un gesto de nerviosismo que no supe cómo interpretar, pero mi decisión estaba tomada, así que apurando mi última opción de conquista, me levanté del asiento y balanceando mi trasero de la forma más insinuante que supe me encaminé otra vez al interior de esa casi impenetrable y morbosa oscuridad.


 

     Llevaba ya un buen rato dentro del cuarto bailando yo solita y allí no aparecía ni Dios. Me empezaba a cansar del juego y estaba a punto de salir dando por terminada la noche, pero entonces percibí que la cortina de la entrada se abría y alguien penetró al interior, mi corazón se aceleró y continué moviéndome al son de la música en el centro de la salita, hasta que de pronto sentí un roce en la cadera, continué moviéndome como si nada. La persona que estaba muy cerquita, dándose cuenta de mi reacción pasiva, tomó más confianza y sus fuertes manos me tomaron por la cintura, comenzando a perrear detrás mío muy morbosamente, sentía como poco a poco se iba apretando contra mi culo que yo lascivamente meneaba contra aquella enorme dureza, mientras que sus manos amparadas por la oscuridad se iban desplazando por todo mi cuerpo magreándome de una manera decidida y procaz.

 


    Me sentí muy satisfecha por haber conseguido llegar a aquella situación que tanto había deseado durante toda la noche, inevitablemente la adrenalina se hizo dueña de mí y me sentí tremendamente cachonda, sobre todo al llevar tanto tiempo sin estar con un macho de verdad y quizás también, por el añadido de haberme tomado dos copas durante el tiempo de espera (el alcohol de manera moderada, consigue el efecto de que mi mente sea mucho más proclive a la excitación y al vicio). Fuimos desplazándonos bailoteando con movimientos lentos, pero al mismo tiempo viciosos hasta el fondo del cuarto, al llegar cerca de un banco que había pegado a la pared, me di la vuelta y mi pelvis comenzó a frotarse rotando contra sus genitales, en ese instante me di cuenta de lo grande y sobre todo gorda que tenía la polla y también de que se trataba del chico que más me había gustado. Con suavidad bien medida me fue desplazando el vestido hacia arriba, hasta dejarlo por encima de la cintura. Una de sus manos bajó hasta mi trasero sobándolo a su entero placer, mientras que la otra desplazaba la mini braguita a un lado con la clara intención de dedearme el coñito. Para facilitar sus deseos y eliminar obstáculos, terminé por quitármela y permití que pudiera tocarme sin impedimento alguno, como impulsivamente hizo. Con todos aquellos tocamientos no pude evitar empezar a gemir como una perra en celo, mientras que el macho dándose cuenta de mi calentura y predisposición, buscaba mi boca y yo el contacto de su pija, nos besamos como dos enamorados, nuestras lenguas comenzaron un frenético y vicioso baile mientras nos pajeábamos como posesos. Yo estaba ardiendo de excitación debido en gran medida a lo morboso de la situación, pero sobre todo a que siempre que estoy con un Macho de boca limpia y cuya lengua húmeda de saliva sabe recorrer mis labios mojándolos sin descanso, para terminar penetrando dentro de mi boca enroscándose con la mía en un tórrido morreo, pierdo el conocimiento. Mis sentidos se dividían o multiplicaban, no sé muy bien que decir, ya que también por abajo notaba como aquella tranca no paraba de crecer entre mis dedos hasta alcanzar un tamaño más que apreciable y no podía evitar el deseo de tenerla dentro de mi húmeda rajita.

 


      Reconozco que en aquel momento ni me acordaba de que el cabestro de mi marido estaba fuera sin tener la más mínima idea de lo que estaba ocurriendo dentro del cuarto y de los enormes cuernos que le estaban creciendo. Mi mente estaba casi totalmente entregada por la fuerza del deseo. El joven semental me sacó las dos tetas por el escote y comenzó a acariciarlas primero y a lamerme los pezones después, absorbiendo de ellos como un bebé hambriento, llegando a ponerlos como garbanzos de duros, luego me hizo sentarme en el banco que había pegado a la pared, me abrió las piernas y comenzó a comerme el chocho maravillosamente haciéndome gemir como una puta caliente, estuvo un buen rato recorriendo la rajita con su lengua y poniéndome al borde del orgasmo. Yo también deseaba corresponder al placer que me había proporcionado, así que le hice sentarse e inmediatamente me incliné para mamarle la polla como si no hubiera un mañana, la tenía muy gorda y me costaba mantenerla dentro de mi boca, aunque no desaproveché el lujurioso momento para juguetear largamente con aquel hermoso glande que no dejaba de expulsar líquido preseminal. En la oscuridad los sentidos se agudizan y el olor a sexo lujurioso invadía nuestro entorno provocándonos la necesidad de ir más allá, cogí su polla y tiré de ella haciéndole levantarse, nos pusimos de pie uno frente al otro, enseguida nuestras bocas se volvieron a juntar, esta vez con el afrodisíaco y estimulante olor de nuestros respectivos sexos. Seguimos morreándonos como cerdos babosos, mientras que con mi mano usaba el grueso capullo para darme y mojarme a lo largo de toda la raja y clítoris. El joven macho movía la pelvis descontroladamente, buscando introducirse dentro de mí. Me di cuenta de su viciosa intención y para evitarlo cerré las piernas bruscamente aprisionando su verga fuertemente dejándola atrapada entre ellas y los labios de mi coño que todavía no estaba preparado para recibir una tranca de aquel calibre, el Macho no paraba de follar mis piernas convulsivamente y claro, aquel incesante roce contra mi caliente conejito me estaba poniendo malísima de tanta excitación. Ambos gemíamos como perros desenfrenados y por mi parte, en cada movimiento que el chico daba con su pene, sentía como mis piernas se aflojaban e iban cediendo a lo que parecía inevitable, ya casi estaba a punto de dejarme penetrar, cuando sentí que alguien ajeno a nosotros dos, me tocaba la cintura y seguidamente el culo desnudo, aquello me sorprendió y me cortó el excitante momento de calentura. Lógicamente quise saber de quien se trataba, encendí la pantalla del móvil y vi que era el gilipollas del cornudo sentado en el banco que nosotros habíamos ocupado hacía un momento para darnos placer, le pregunté ásperamente, qué coño hacía allí y me contestó de forma sumisa que ya habían pasado veinte minutos y que por eso había entrado, le dije que era un estúpido aguafiestas y que dejara de molestar, que cogiera la mini braguita para que no se extraviara y que se marchara fuera hasta que yo saliera, agachó las orejas como un puto mierda y se marchó del cuarto. Mientras el manso salía, el chico y yo volvimos a lo nuestro sin hacer ni puto caso del desgraciado cornudo.

 


    Aunque las enormes ganas de morbo que yo tenía de VOLVER A EMPEZAR a disfrutar de todo lo que me había visto obligada a dejar debido a las restricciones pasadas. Aquella noche al ser la primera salida después de tantos meses, mi intención no era otra, que la de tener una primera toma de contacto con el ambiente swinger y en ningún momento me pasó por la cabeza el que se me diera la oportunidad de follar, así que debido a ese torpe pensamiento no había tenido la precaución de meter en mi bolso el tubito de lubricante. No obstante, aquel gordo capullo expulsaba bastante líquido preseminal que el chico esparcía hábilmente a lo largo de los labios de mi coñito humedeciéndolos. Mi calentura era máxima e incontrolable, así que llegó un momento que abriéndome de piernas le pedí que me la metiera, pero no sin antes advertirle que fuera despacio, porque estaba muy cerradita de no follar en tantos meses, se sorprendió pero me contestó que estuviera tranquila, que me la metería con mucho cuidado y suavemente, después se agachó me abrió el chocho con los dedos y escupió dos veces en la caliente cueva, luego se levantó y apuntó el duro ariete hacia la entrada de mi estrecha rajita, empujó lentamente desplazando con el grueso capullo los labios mayores muy humedecidos por nuestros jugos y comenzó a penetrarme. Mi excitación me hacía desear que toda aquella gorda tranca invadiera mi interior hasta que sus calientes huevos hicieran tope, pero cuando el viscoso glande comenzó su andadura invadiendo mi interior, sentí un incipiente dolor que me hizo comprender que todavía era demasiado pronto para que mi coño pudiera albergar una tranca de aquel calibre, así que muy contrariada por no ser capaz de acoger en mi vagina aquel hermoso rabo, le pedí que sacara lo poco que me había podido meter, pero a pesar del dolor, no me resignaba a terminar sin correrme y también quería que él lo hiciera, así que como seguíamos demasiado calientes, le propuse terminar los dos masturbándonos, el chico entendió mi reticencia a ser penetrada y tampoco le desagradó la idea de corrernos tocándonos y retozando como cerdos, sin pensarlo más nos pusimos manos a la obra (nunca mejor dicho).

 


    Buscando estar lo más cómodos posible, nos pusimos en el banco a comernos la boca, yo me senté sobre sus piernas meneándole la verga, mientras que él me masajeaba el clítoris que quedaba totalmente expuesto al tener mis extremidades abiertas a ambos lados de las suyas. Con el ruido de la música, lo único que se podía escuchar vagamente, era el sonido de algún gemido o gruñido que salía de nuestras gargantas, presas de la excitación, el chico estaba sentado hacia la puerta y por ese motivo pudo darse cuenta de que alguien volvía a entrar en el cuarto y se acercaba a donde nosotros nos encontrábamos, me dio una palmadita en la pierna advirtiéndome de la inoportuna presencia, volví un poco la cabeza, bastante molesta y pensando que sería otra vez el cornudo, pero al girarme vi en la penumbra que la silueta era mucho más grande y me di cuenta de que se trataba del amigo de mi macho de ese momento, me echó mano al culo sin pedir permiso y yo se la retiré rápidamente, negándome de inmediato a que participara con nosotros en una especie de trío, que es lo que parecía buscar. Mi negativa fue muy tajante por dos razones de peso: la primera, porque en aquel instante solo me apetecía jugar con el chico que había conseguido calentarme como una perra y con el cual ya había conectado perfectamente y la segunda y también muy importante, porque cuando le había tocado la pollita en el glory hole había podido comprobar que la tenía bastante pequeña y no me motivaba absolutamente nada, bastante tengo con la mierdecilla de penecito que tengo en casa (en una corta secuencia del vídeo se puede ver la colita del amigo). El chico aceptó mi negativa sin problema alguno y salió del cuarto, de esa forma nosotros pudimos terminar de desahogar nuestras respectivas calenturas con unas corridas bestiales. De la que yo tuve, puedo dar y fe y pienso que para mí joven semental, por el gruñido tan fuerte que dio, también lo fue.


 

     Salimos los dos cogidos de la cintura, yo un poco mareada por todo lo vivido y también por el efecto de las dos bebidas que me había tomado, me quedé un rato hablando con ellos y permití que mi amante le mostrara mis pechos a su amigo y se los dejara tocar (siempre con mi consentimiento, claro está) cuando lo estaba haciendo volví la mirada y me encontré con la del puto ciervo y su estúpido semblante entristecido de cornudo abandonado, todos los presentes se habían dado cuenta de lo que es y más de alguno miraban la situación con gesto burlón. Pasado un tiempo me senté un poco a su lado y con sorna le acaricié la frente, fingiendo que me pinchaba, logrando con mi gesto burlón que se escuchara alguna risita. Cuando me hube terminado de relajar, le ordené al cabestro (pensando en vosotros) que me sacara algunas fotos por la zona de arriba, para que pudierais ver el vestuario que me puse para esa primera ocasión ya que en el vídeo estaba segura de que no se podría apreciar bien (tal y como así fue). Después de que el manso me sacara algunas instantáneas haciendo poses que os pudieran gustar, le dije que por esa noche ya me había divertido suficientemente y le ordené marcharnos, ya que allí quedaba muy poca tela que cortar.

 

     Desde aquel día ya he hecho un par de salidas más y en ninguna de ellas me he olvidado de meter el lubricante en el bolso ya que nunca se sabe dónde puede saltar la liebre o el "conejo"    

 


38 comentarios:

  1. Buenas noches Ama Dana, es un placer para mi vista ver su cuerpo de diosa. También es un alegría que pueda ir recuperando la vida anterior, llena de morbo, cuernos para la perra maricona, y pollas que puedan satisfacer ese cuerpo maravilloso, y facilitar leche para la merienda de la cornuda.
    A sus pies Ama Dana

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  2. Saludos cornudo salido, lo primero y en cuanto a tu comentario, quiero que te quede muy claro que la miel nunca se hizo para la boca del cerdo y menos si es un cerdo mariquita como tú.

    De todas formas en tu caso sería imposible que puideras llegar a catarla aunque tuvieras la mínima posibilidad.

    Desde luego que es una alegría para mi cuerpo el volver a vivir situaciones de alto contenido sexual, con machos de verdad y no con mariconas como tú o Porky.

    De todas formas tus deseos para mi futuro inmediato son muy aceptables.

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  3. Muy bueno el relato contado al detalle que entre eso y las fotos me has excitado al máximo, me pareció muy bien el rechazo al otro pretendiente después de comenzar la calentura con el primer macho, solo faltó culminar en una buena follada pero me imagino que después de la buena corrida de ambos quedaríais igual de satisfechos, un saludo Dana y a seguir disfrutando del buen sexo.
    Tony.

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    1. Hola Tony, me encanta saber que te has excitado con la lectura de lo que yo experimenté esa primera noche, después de tanto tiempo de abstinencia.

      Yo quedé muy satisfecha, pero un poco decepcionada por no haber podido aguantar en mi interior el tamño de una verga tan hermosa como la que el chico tenía.

      Pero te puedo asegurar que todo se andará y sin tardar demasiado o quizás se haya ya empezado a andar. Ahí lo dejo

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  4. Un placer como siempre volver a saber de ti y de el Caracol cornudo con el que compartes oxígeno la mayor parte del tiempo. He de decir que me he pajeado muy a gusto con tus fotos. Aunque sobre todo tengo ganas de follarme al cerdo en un local donde solais ir a la vista del todo el mundo. Me gustaría aportar mi gramo de arena en la degradación absoluta del hijo de puerca

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  5. El placer inmenso sería el mío si se pudiera hacer realidad algo como tú describes. Contemplar como un tío como tú somete y utiliza al cerdo como depósito de semen follándotelo a cuatro patas, tratándolo como una puta sumisa, mientras otras persona se divierten o excitan con la degradación del hijo de puerca, me resultaría de lo más vicioso y me pondría súper cachonda.

    Felices pajas Euron y gracias por tus perversas ideas, me encantan

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    1. Claro
      Algún día lo haremos. Es que me gusta ver a un ser tan despojado de dignidad como el puto Porky y me da morbo saber hasta que punto se puede degradar como basura pseudohumana

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    2. El punto hasta donde se puede llegar a degradar, vejar, humillar o usar al desgraciado animal de nombre Porky, lo podrás comprobar ese día en el que piensas conocerlo y conocerme, por mí no quedará.

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  6. Excitante relato y enhorabuena por haberlo disfrutado.
    Porki, sigue siendo inoportuno. Todavía no asimila su papel de cornudo.
    Besos húmedos.

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    1. Cuanto me alegro de que te haya gustado. Como ves ya he empezado a divertirme de nuevo, así que lo que tú ya sabes no ha de tardar demasiado.

      En cuanto a lo inoportuno y bobo que es Porky, que te voy a contar que tú no sepas. Espero que me lo espabiles como tú sabes hacerlo y le enseñes las obligaciones que debe acatar y ejercer un buen cornudo sumiso como él.

      Besos virtuales, que espero muy pronto sean reales

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  7. En serio, todavía me sorprende la falta de tacto y de empatía por ti de Porky. No ya como sumiso sino como marido debería conocerte y saber cuándo no debe intervenir e interrumpir. Pareciera que lo hiciera aposta. Pero es que como esclavo tuyo es ya inaudito. Si el fin de todo ésto es tu placer ¿cómo hace semejante cosa? No es ya un novato, lleváis años en esta dinámica. Debería ser el primero en conocerte y saber cuándo puede y cuándo no intervenir. NO es la primera de esas que narras que hace. Se puede entender al principio, las primeras veces, que se rompa, que no lo soporte y eso pase por encima del hecho de que seas su Ama, pero ¿a estas alturas? debería ser un maestro en facilitarte esos momentos con tus amantes, en que fueran lo más placenteros posibles para ti.

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  8. No sé como te sorprende la bobería manifiesta de Porky, está bien claro a través de los relatos que os cuento que sigue siendo la estupidez personificada.

    Cada día que pasa es más inútil y encima a mí me encanta confundirle para que no tenga claro lo que debe hacer en cada situación y que tenga que titubear, pensando que se puede ganar un buen castigo.

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  9. En palabras de un viejo poeta: Virgen de medianoche, Virgen eso eres tú, para adorarte toda, rasga tu manto azul.
    Señora del pecado, luna de mi pasión, mirame arrodillado...

    De un cornupeta enamorado.

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  10. Saludos "cornupeta enamorado", alucinada me has dejado con lo de "VIRGEN", ja,ja,ja, aunque no te negaré que en estos momentos casi estoy así, después de tanta abstinencia, aunque ya empiezo a poner remedio a esa "casi viginidad" y mi coñito empieza a adaptarse a lo que yo necesito.

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  11. Hola Dana, yo pienso que perfectamente podías haber follado con ese chico joven en el local swinger a pesar de tanto tiempo de abstinencia no lo entiendo no creo que tenga nada que ver, besos Dana.

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  12. Lo primero que quiero decirte es que no me gusta hablar con gente anónima, cosa que he dicho en bastantes ocasiones.
    Lo segundo es que lo que tú entiendas o dejes de entender me importa muy poco, yo sé lo que siento y por lo tanto soy la que decide lo que hago y cuando lo hago.

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  13. Buen dia Ama Dana. Bella y sexy como siempre. Por supuesto han caido las pajas al verla con su culo pompa con esa microtanga y esas medias que resaltan sus piernas perfectas.imposible evitar hacermelas. Me alegro que retome el camino de su satisfaccion sexual y martirio del cerdo. Lo minimo que Usted merece. Ojala pronto el animal sea empotrado frente a Usted asi Usted podra ver cumplido una vez mas ese deseo y a la vez aumentar su plenitud sexual. Gracias por compartir su belleza Ama. Demasiado premio para los ojos de este cornudo pito corto. Es Usted bellisima. A sus pies. cornudoandres.

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  14. Saludos cornudazo, hay que ver lo marrano y vicioso que eres, siempre pelándotela como un mono salido.

    Me gustaría tenerte de rodillas delante de mí meneándote tu miserable penecito, hasta que consiguieras derramar la lechecita de tus asquerosas pelotas de ping pog. Cuanto me iba a reir de ti, hijo de perra.

    A mis pies tendrías que estar cabestro inútil.

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  15. Gracias por sus palabras Ama. Quien pudiera estar a los piescde un mujer de semejante calibre. Saludos. cornudo andres

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  16. Hola Dana; siempre es un placer acceder a tu blog, leer tus relatos, y sobretodo contemplar tus fotografías en las que nos muestras la plenitud de tu cuerpo desnudo y soñar con gozar de él

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  17. Gracias amigo calenturiento, me alegro de que obtengas placer accediendo a los encuentros morbosos que intento detallar de la manera más real a como sucedieron (Quizás por eso no me resulta demasiado difícil escribirlos).

    Algunos sueñan o fantasean con mi cuerpo y algún que otro privilegiado puede acceder a tocarlo o saborearlo.

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  18. Hola Dana después de leer esta entrada seguro que en la próxima ya nos cuentas que has echado ese merecido polvo que tanto esperamos leer y también si al final has practicado el juego de agujas con el imbecil de tu maridin, un saludo Dana.
    Tony.

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  19. Hola Tony, en la próxima entrada ya veremos lo que cuento, no me gusta adelantar acontecimientos. Lo que si te puedo asegurar es que tengo vividas muchas situaciones de alto contenido que están deseosas de salir a la luz.
    Gracias por escribirme

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  20. El lubricante, que nunca falte en un bolso bien preparado, jajajaaj.

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    1. Sin duda alguna, de hecho ya lo llevo para evitar que me vuelva a pasar una situación similar.

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  21. Me maravilla ver cómo sigues manteniendo viva esa lujuria que emana de tus relatos y de las fotografías que compartes con nosotros (cuántas pajas en estos años y las que quedan por venir).
    Has conseguido que llegase a "odiar" a el animal de bellota con quién compartes residencia, aunque su hábitat natural sería una cochiquera; pero a pesar de su condición de infrahumano, caricatura de hombre, cuyo destino es hacer de mamporrero; ocupándose de mantener las pollas de tus machos en perfecto estado para que te hagan gozar.
    Pero no puedo olvidar que semejante espécimen sobó tu cuerpo, profano tu coño, introduciendo dentro esa "pollita" cometiendo la herejía de preñarte; por eso cuando relatas los "tratamientos" a que le sometes no puedo evitar una satisfacción al imaginarmelo lloriqueando y babeandose.
    Como me gustaría participar en una de esas sesiones de adiestramiento a que le sometes. Descargarla en el mi "frustración" y "rabia" al pensar que probablemente fue el primero, cabrón hijoputa; como azotaría tus nalga sebosas y pellizcaría esas "tetillas" se Sissi retorciéndose esos pezones cochiqueros y al tiempo te obligaría a "comerme" la polla, "regalándote" mi leche.
    Ahora que ya me he desahogado, puedo decirte que soy un ferviente seguidor tuyo; me encanta revisar de vez en cuando tú tú trayectoria y tú evolución. Las primeras fotografías aparecía una joven algo "timorata" que nos enseñaba su braguita, la sesión en que lo llevaste para que aquella pareja lo "porculizasen" daba la impresión que tratabas de hacérselo más "suave el trago" ya que lo acariciabas y a continuación, quitándole las bragas, te colocaste a horcajadas sobre su cara, poniendo to coño a la altura de su boca y me imagino que te lo comería.
    Bueno, seguiré soñando con tu cuerpo con la resignación de saber que es algo inalcanzable.
    Un "casto beso", ¿o no?

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    1. Comenzaré comentándote que como muchas veces he dicho me gusta que los mensajes que me enviais no sean anónimos, porque quiero saber su procedencia. De todas formas como me parce morboso y perverso tu escrito, lo contestaré.

      Me encantaría contemplar como alivias ese asco que te inspira el puerco cornudo, proporcionándole ese tipo de "caricias" que me cuentas para que aprenda lo que es y lo poco que vale como hombre, para mí no es ni una caricatura de lo que es un macho.

      No sé porque dices que yo puedo ser inalcanzable, tus deseos hacia mí y tus anhelos de torturar al cerdo, serían un excelente comienzo.

      Te devuelvo ese "casto beso" ja,ja,ja

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    2. voyeurgallego@gmail.com15 de mayo de 2022, 12:08

      Perdón, no era mi intención la publicación desde el anonimato. Algo debí hacer mal.

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    3. Genial "voyeur gallego" me gustan tus morbos y perversiones.

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  22. Estoy en la campaña del Níspero y pensé que guay sería tener a Porky para al acabar de trabajar poder follarnos su culo y acabar bien relajados hasta el dia siguiente

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  23. Saludos Eurón, yo estoy deseando llevarlo a algún sitio donde haya varios tíos que no hagan ascos a un culo gordo de puerco para que lo preñen uno detrás de otro tanto por el hocico como por el culo, se me iva a mojar el chocho viéndo como es sometido y jodido.

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  24. Por eso lo Decia, toda a cuadrilla follandoselo

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  25. Ansioso Dana de saber de tus próximas aventuras y de la vida del puto cerdo 🐽, mucho tiempo sin saber de ti, besos.
    Tony

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    1. Tienes razón Tony, pero las circunstancias obligan en muchas ocasiones.
      De todas formas tranquilo que en casi nada voy a publicar reportaje. Ya lo tengo casi terminado.

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  26. Espero ver más vídeos y fotos tuyas eres una Diosa para mi y me gustaría ser tu perro sumiso aunque sea solo de esta forma

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    1. Ya he dicho muchas veces, que no me gustan los comentarios anónimos

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    2. Soy Alberto de Barcelona y sigue en pie ser tu perro sumiso de Barcelona

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    3. Saludos perro, lo primero que debes hacer es escuchar mis CONDICIONES, que las tienes arriba a la derecha y si estás de acuerdo con todo, me escribes a mi correo y veremos que se puede hacer

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