Después de ese tremendo beso apasionado, entre Jorge y Dana,
se despidieron con un amigable,
- Ya nos llamaremos,
Luego se volvió hacia
mi y a modo de despedida, me dio una fuerte palmada en la espalda
diciéndome,
- Cabronazo, menudo susto le has dado a tu mujercita, más te
valía quedarte y tomarte un copazo a ver si te vuelve el color a la cara, te
veo muy pálido, ja,ja,ja,
- No, lo siento Don Jorge, gracias pero no me encuentro nada
bien.
- Vale, valeeeee..., pero recuerda, cada vez que beses a tu
esposa piensa que mi lengua y polla han estado disfrutando de esa boquita
jugosa, ten siempre eso muy presente, ya verás como te acabas acostumbrando y
hasta puede que gustando.
No quise contradecirle, su vozarrón agresivo me atenazaba así
que me despedí bajando la cabeza y retirándonos salimos a la calle, yo iba un
paso por detrás de mi esposa e hice mención de cogerle la mano, pero se apartó
rechazándome.
El aire fresco de la noche, me provocaba temblores, pero aún
así quería sentirlo en la cara, era como si me faltara oxígeno en los pulmones.
Fuimos hasta casa sin cruzar palabra alguna, al llegar Dana se me quedó mirando
de forma inexpresiva y me dijo
- Me voy a la ducha y luego a dormir, estoy muy cansada,
necesito descansar, me has hecho sentir muy mal por verte tan abatido,
- Lo siento pero he perdido la cabeza, no he podido con esa
situación y no he sabido comportarme, pero no volverá a pasar, te lo prometo -
le dije con ánimo de recuperar la normalidad en nuestra vida,
- Gracias, yo también siento lo que me ha sucedido,
olvidaremos todo esto y trataremos de pensar que nada de esto ha pasado y ha
sido como un mal sueño al que no debemos dar importancia, - me dijo tratando de
autoconvencernos
- Si, tienes razón cariño, ha sido un mal sueño, si......, lo
olvidaremos, si....., buenas noches
- Buenas noches, - se despidió con semblante triste.
Me acosté tratando de no pensar, pero era muy difícil, las
escenas sexuales vividas, bailaban en mi cabeza, pasando unas veces rápido y
otras...., (en los momentos más duros para mi), desfilando muy lentamente, no
sé que hora sería cuando logré conciliar el sueño.
Por la mañana, me desperté ojeroso y algo más tarde de lo
habitual, era día de fiesta, nos juntamos en la cocina desayunando y aunque
tratábamos de aparentar una situación normal, los dos eludíamos la mirada y
estábamos prácticamente mudos.
Pasamos el día tratando de hacer cosas que nos distrajeran, yo
no podía dejar de pensar en las manos de Jorge, recorriendo el cuerpo de mi
esposa, sobándola viciosamente, mientras ella estaba con la mirada perdida, no
podía quitar de mi pensamiento aquellos ojos casi en blanco y los gemidos de
placer que salieron de su garganta, nunca antes los había oído tan expresivos
como en esa terrible noche.
Transcurrió toda la jornada con esa desazón en el cuerpo, me
imagino que Dana también lo estaba pasando mal, (supuse que estaría
arrepentida) pasó ese día y otro más en condiciones similares, pero el segundo
día por la tarde sin saber como, mi mente empezó a actuar de forma extraña y me
di cuenta de que lo que había sucedido, lo estaba viendo desde otro ángulo
distinto y morboso, esa noche los sueños fueron tremendamente sexuales,
mezclando en ellos, a Don Jorge, Dana, los clientes, el Pub y yo como
espectador de primera fila, me desperté tremendamente excitado, mi pollita la
tenía muy dura y en esos momentos no sabía que es lo que me estaba pasando para
estar en ese estado, el morbo de lo ocurrido se estaba apoderando de mí y
empezaba a tener necesidad de vivir una vez más, algo parecido a lo que había
sucedido, me encontraba muy confundido y tampoco sabía que decirle a Dana, opté
por sacar el tema por la noche mientras estábamos sentados en el sofá viendo la
televisión, me acerqué a ella y le pasé la mano por el muslo, ella cerró las
piernas y me apartó la mano, fue como un acto reflejo, me sentí rechazado y le
dije a modo de reproche,
- El otro día a Jorge si que le dejabas tocarte
- Ya sales con tus celos otra vez, ¿No quedamos en que lo
olvidaríamos?,
- Perdona cariño, es que me cuesta apartarlo de mi pensamiento
- ¿Te crees que yo no lo recuerdo?, no me lo hagas más difícil
por favor
- Lo siento cielo, no sé que me pasa.......¿Y si volviéramos
otra noche por el club? ¿Lo digo por afrontar algo de la realidad y poder
olvidar lo que nos pasó con Jorge?
- ¿Estás seguro de que quieres olvidarlo? ese bultito que
estoy viendo en el pijama, desde hace rato, parece que quiere decir algo
distinto. ¿Estás excitado?
- No sé que me pasa mi amor........, no entiendo nada.....,
estoy sintiendo sensaciones raras, cariño mío, no sé que pensar de lo sucedido.
Se me quedó mirando extrañada, hizo una larga pausa y después
de un incómodo silencio, me dijo,
- ¿Y si te digo que he estado hablando con Jorge.......,
durante bastante tiempo?, ¿te lo vas a tomar a mal?
- Me dices eso para molestarme por lo que te he dicho
- ¿Tu crees que tengo necesidad de molestarte? Tanto ayer como
hoy, mientras estabas trabajando hemos tenido una interesante conversación,
necesitaba poder desahogarme con alguien y ¿Quien mejor que él? fue mucho y muy
distinto todo el goce que tuve en sus manos, a lo que tu y yo hemos tenido
hasta el momento, lo siento por ti, pero debo confesarte que ahora conozco lo
que es el sexo de verdad y me resulta difícil cerrar los ojos y continuar como
antes.
Yo no sabía que contestar, siguió hablándome,
- Jorge me avisó de que esto iba a pasar, el sabía que en tu
mente se producirían cambios fuertes y eso es lo que parece estar pasando, el
pequeño bulto no se te baja desde que te he empezado a contar lo que siento de
verdad,
Intenté taparme con una bata que tenía al lado, enrojecido de
vergüenza, pero Dana con voz tajante y autoritaria como nunca se la había
escuchado, me dijo,
- Quita esa bata de ahí y bájate el pantalón también, quiero
contemplar en todo momento como reaccionas en la conversación, quiero saber si
Jorge tenía razón en todo lo que me ha dicho.
- Pero cariño, ¿Y si baja la niña?
- ME DA IGUAL ¡¡¡QUITATELO YAAAA!!! - dijo gritando - Si te
pilla en estas condiciones, le cuentas lo que te apetezca, será problema tuyo.
Esa manera de hablarme tan avasalladora y nada habitual en
ella, desarboló mi resistencia y obedecí de inmediato, quedando desnudo de
cintura para abajo, mostrando mi pequeño pene ridículamente tieso, hice ademán
de ocultarlo y Dana dijo
- Siéntate y esas manos apóyalas en el sofá, quiero ver tu
colita en todo momento que me apetezca mirarla, me interesan más las reacciones
de ella que las tuyas, tu penecito me resulta más sincero que tus palabras.
Mi esposa mostraba una actitud altiva y al mismo tiempo fuerte
y despectiva como nunca le había visto antes, continúo hablándome
- Podemos volver al club, si es lo que quieres, pero no voy a
aguantar otro ataque de lloriqueos tan estúpido como el del otro día, los celos
si los tienes te los tragarás y callarás.
- De todas forma y para que todo vaya por el camino correcto,
debemos ir antes a ver esa pareja que dijo Jorge, me ha dicho que son
matrimonio real y que se anuncian en el periódico, cobran un precio barato,
porque ellos disfrutan con lo que hacen y de esa forma obtienen su placer y al mismo
tiempo pagan el alquiler del gabinete, me ha asegurado que son muy majos y
totalmente de fiar; quiero que aceptes el acudir a verlos, independientemente
de que luego ya no te apetezca ir al club, si como espero y deseo contestas que
si, concretaré cita, ya le pido el número de teléfono a nuestro amigo.
Quedé dudando sin saber que contestar, me parecía que aquello
se podía escapar de mi control y meternos en un callejón sin salida, todas las
sensaciones que se estaban produciendo eran nuevas para mí, la adrenalina
saturaba mi mente y cuerpo impidiéndome pensar con fluidez.
- No estoy seguro de hacer lo correcto, pero por otra parte,
si no vamos, me van a quedar muchas dudas para siempre...., no sé que
contestarte...., ayúdame tu a decidirme, por favor.
- Pues yo si sé lo que vamos a hacer, viendo la cantidad de
baba que está expulsando tu penecito, lo tengo clarísimo, ahora mismo voy a
llamar a Jorge, sal fuera de la habitación y cierra la puerta no sea que baje
la chica, límpiate esa guarrería babosa y súbete la ropa.
Me dijo esto tirándome un clinex de mala manera; salí de la
habitación e hice lo que me dijo, con disimulo me acerqué a la puerta y traté
de escuchar pero no lo conseguí, solo acerté a oír risitas y un ostensible
cambio de actitud al hablar con él, los celos me torturaban de nuevo, pero mi
pene seguía duro. Pasado un buen rato, escuché un silbido reclamando mi
presencia y entré en la habitación respondiendo a su llamada.
- Ya está arreglado, le he dicho que mañana a las 8 nos puede
ir bien, en principio los va a llamar él para facilitarnos el trámite y después
me telefoneará para confirmarme la cita, casi lo prefiero así, Jorge les
explicará el tema que nos afecta y no cabe duda de que tiene mucha más
experiencia en asuntos de este tipo, además contigo de momento no se está
equivocando en nada, tu manera de actuar se corresponde exactamente a lo que él
me cuenta que va a suceder, es un encanto de hombre.
- De acuerdo cariño, me parece bien lo que dices, iremos a ver
que nos pueden aclarar, ojalá resulte todo bien.
Estas palabras se las dije muy cariñoso, acercándome a ella y
tratando de rozarla, no se explicar que me sucedía pero esos días empecé a
verla de otra forma más sensual, la deseaba como nunca lo había hecho y me
encontraba en un estado de enorme calentura y tensión.
- ¿Quieres que hagamos el amor, cielo? - le dije casi
suplicante
- ¿Te refieres, a que follemos Noooo? ja,ja,ja - Anda, vamos
al baño, no quiero que nos sorprenda la niña y se de cuenta del pequeño pito de
papá, ja,ja,ja.
Nos dirigimos hacia el servicio, yo iba calentísimo y estaba
loco por meterle mi cola y besarla, se sentó sobre la tapa del wc y me bajó los
pantalones hasta medio muslo, pensé que me la iba a chupar; yo estaba loco por
sentir algo que hacía muchos años que había dejado de hacerme, entonces me dijo
con voz burlona,
- Jodeeer, como llevas de babosa la pollita, estás hecho un
guarrete, espera que me pongo un guante para no mancharme.
Cogió un guante de plástico de los de limpiar el baño, que ya
estaba usado además con alguna mancha
sospechosa y se lo puso en la mano derecha parsimoniosamente, ante esa
perspectiva yo estaba decepcionado pero incapaz de negarme a nada, me cogió la
colita y empezó a moverla lentamente al principio mientras la veía sonreír con
malicia, conseguía desesperarme con esa lentitud, de pronto descapullaba la
cabecita y seguido la cubría dando un tirón, eso lo repetía una vez tras otra,
causándome un enorme encelamiento. De pronto paró descapullándola al máximo y
casi haciéndome daño.
- Nunca me había dado cuenta de lo pequeñita que la tienes, ya
decía yo que no era normal que la sintiera tan poquito, ¿Has visto que con dos
deditos me sobra?, ¡CIERRA LOS OJOS! ¡ME JODE QUE ME ESTES MIRANDO! ahora
concéntrate y recuerda el tamaño de polla que tenía Jorge, no sabes cuanto me
gusto tocársela, me hizo ver el paraíso cuando la sentí dentro de mi, como
palpitaba en mi interior, nunca noté una sensación semej..........., -
Diooooos, que cerdo eres, mira como me has puesto, guarro, ¿No me sabes decir que
te corrías?, cada día eres más asqueroso, JODEEERRR.
No había podido contenerme y entre bufidos y convulsiones
había eyaculado, manchándole su faldita y medias, hacía mucho tiempo que mi
semen no salía salpicando de esa forma, pero el volver a recordar lo ocurrido,
me había hecho explotar con toda esa fuerza, me parecía increíble que toda esa
humillación hubiera desencadenado en ese tremendo orgasmo.
- Lávate y sal de aquí que me tengo que quitar la ropa para
lavarla y no quiero que me veas desnuda, luego te vas a dormir, pero hoy te
acuestas tu en el cuarto pequeño, llevo varios días que no descanso demasiado
bien.
- Perdona amor, no he podido contenerme, si te da igual vamos
a acostarnos los dos en la cama de matrimonio ¿Quieres?.
- De eso nada, cuando tengamos más clara nuestra situación y
según te comportes en la cita de mañana iremos viendo.
Agaché las orejas sumisamente y no comprendiendo porque no
quería que yo estuviera presente cuando se quitaba la ropa, me marché y acosté
en la cama pequeña. Al reposar la cabeza en la almohada pude percibir con
excitación, el delicioso perfume de mi amada y envuelto en él conseguí
conciliar el sueño.
Al día siguiente y en la hora del almuerzo, me llamó Dana al
trabajo y me dijo
- Mira a ver como te las apañas para salir antes, ya he
hablado con Jorge y nos han dado cita para las 7, por lo visto luego tienen
otros asuntos que hacer y no quieren ir con prisas, ya tengo la dirección
apuntada, no está muy lejos de casa, ven puntual, adiós.
Me pasé la mañana pensando en que podía consistir la terapia y
que les podríamos contar, sin entrar en muchos detalles, no me hacía ninguna
gracia tener que exponer nada de todo lo que habíamos vivido en el club; por
otra parte tampoco sabía que les habría dicho Don Jorge.
Para poder salir antes del trabajo puse como excusa que tenía
que resolver un problema y sin que me pusieran pegas marché a casa, llegué
pasadas las seis y encontré a mi señora nerviosa y ya arreglada así que le
dejamos preparada la cena a nuestra hija, me di una ducha rápida y acudimos al
lugar de la consulta, se trataba de un edificio normal, más bien de clase baja,
no tenía ni ascensor, era un cuarto piso, tocamos el timbre, yo bastante
nervioso y me imagino que Dana también. Salió a recibirnos un hombre, más bien
grueso en pantalón corto y camiseta y detrás de él su pareja con una batita
negra, al instante nos saludaron amablemente
- Buenas tardes ¿Sois Dana y marido verdad?
- Buenas tardes,- contestó mi señora, - Ya saben venimos
recomendados por Jorge
- Si como no, es un buen amigo y ya nos ha explicado y sabemos
lo que quieres, adelante por favor.
Dana cada día te superas. Me tienes que presentar un día a la piltrafa de marido que pareces.
ResponderEliminarHola diego Evo, no tendré ningún problema en mostrarte a mi ejemplar de ganado ovino, pero para eso tendrás que escribirme a mi correo y ver si es posible.
EliminarMmmm...cómo me gusta releer estos primeros momentos de autoridad y de toma del control por tu parte ante el mequetrefe del manso minipolla...
ResponderEliminarLas fotos son perfectas para que todos y todas puedan ir comprobando tu transformación y cómo fuiste cambiando tu estilo, mucho más recatado y tradicional (que de todos modos también dejaba ver lo atractiva que eres) por el que realmente más se ajusta a una mujer con tu carácter, tu físico y tu privilegiada capacidad sexual.
Ese mi propósito Delfy, que se pueda comprobar el cambio que experimenté de mis comienzos, cuando solamente era un esposa complaciente de un hombre que no se lo merecía a los tiempos actuales en que mi vestimenta habitual es más bien provocadora y nada discreta como tu bien sabes
EliminarQue bueno, si era asi al principio no quiero pensar como es su autoridad ahora, señora, esta claro que mucho mas. Tego interes en la vida de su sumiso marido, me pregunto si lo tiene controlado el correrse y cada cuanto tiempo lo deja hacer, imagino que cuando le deja hacer ser para masturbarse y no para, con perdon, follar. Muchas gracias, soy ya fiel incondicional de su blog y eso que llegue hace poco pero me lo he leido todo en dos tardes. Gracias-
ResponderEliminarHola amigo, que buena noticia que hayas cogido el blog con tanto interés.
EliminarLa autoridad que tengo actualmente sobre mi esclavo la irás descubriendo conforme el blog avance.
Es adelantarme a los hechos, pero si es cierto que controlo los estados de excitación del cornudo, me gusta alargar el sufrimiento del mismo y para ello tengo diferentes artilugios de castidad forzada que me facilitan esa labor.
Soy Machoalfa1968 uno de tus mas fieles seguidores de hecho en los últimos 7 años el 90 % del porno que e consumido a sido leerte y verte.
ResponderEliminarCon suerte me escapo un día y nos damos un homenaje y descuida te empitono a estos lamepollas, que hay en tu cuadra así estarás calentita para mi.
Hola Machoalfa1968, si algún día nos conocemos espero que hagas honor a tu Nick, no creas que me encuentro tantos Machos Alfa con conocimientos para comportarse como tales.
EliminarPor otra parte si te brindas a empitonar a mi perro, no sabes como me gustaría.
Ama Dana. Tras su invitación sigo su blog y aunque son sus principios que ya leí en pajilleros, no puedo dejar de pensar en Vd., en lo que podría hacer con una perra como yo.
ResponderEliminarEl cornudo que tiene a su lado ya apuntaba maneras y ya sabemos los que la seguimos como acaba pero no quita morbo y sobre todo esperamos que al menos la sirva para saber que tiene muchos perros sumisos admirando su cuerpo y su forma de ser
Hola C S, los principios eran obligados ponerlos para que todos los que me visitan entiendan como me convertí en lo que hoy soy, no obstante al haber paasado tanto tiempo desde que todo esto sucedió, en los primeros relatos se omitieron algunos detalles que he añadido aquí para más información
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